viernes, 4 de septiembre de 2015

Capitulo 6: la azotea II

"Esta ocasión tal vez no seamos más que nosotros mismos...
Y a través del tiempo nos detenemos en el presente para encontrar el significado de la existencia."

Alan se dedica a contemplar las luces nocturnas mientras platica relajadamente con Robert - la ciudad es hermosa de noche -
Robert encuentra en ese comentario una brecha para liberar su mente y disfrutar del encuentro - de día también tiene su encanto, creo que fue lo que me atrajo la primera vez que estuve aquí, pase mucho tiempo buscando un lugar donde poder disfrutar la vida... por lo menos ha sido así hasta ahora; Te ves mas recuperado, la ultima vez que te vi estabas en cuidados intensivos y no me quede mucho tiempo, ya la enfermera me había dicho que faltaban un par de días para que te dieran de alta -
En medio de la conversación Alan toma un trago mientras contempla el fondo casi vacío del vaso, su mirada se pierde en el espacio - eso ya quedo atras. A veces la vida te sorprende de mala manera pero te logras poner de pie. yo... nunca te agradecí por lo que hiciste... gracias por sacarme... - la mirada perdida de Alan se vuelve fija y segura, en un momento cambia súbitamente tanto así que le causa en Robert una impresión y todo se detiene. Alan sin darse cuenta está agarrando en su mano una línea de luz fucsia que se comporta como una cuerda que lo cruza todo. Atraviesa y une a todo y a todos y Alan entra en el vacío...

-... yo... nunca te agradecí por lo que hiciste... gracias por sacarme... - la mirada perdida de Alan se vuelve fija y segura, en un momento cambia súbitamente tanto así que le causa en Robert una impresión...
Con esta frase Alan extiende su mano hacia Robert logrando un apretón de manos Lo que deja a Robert con una expresión de incertidumbre. En este punto habían bebido lo suficiente como para que Robert pensase que ya era hora de parar el alcohol . Al final Alan se tranquiliza al ver la reacción de Robert ante el apretón lo cual le permite seguir bebiendo mientras admira el firmamento

"todo va tomando forma..."

Capitulo 5: la azotea I

Alan en su departamento de diseño amplio e iluminado contempla por la ventana sosteniendo una taza humeante; a través de la ventana puede ver un día soleado que se torna oscuro y casi de noche. Pops le rosa la pierna buscando atención cuando se percata que esta en la cocina, - olvide ponerte agua, pensé que ya te había puesto- cuando se dirige a tomar el envase en el piso este Está lleno a tope -¡¿?!.. mmm- se olvida del tema.
En la mesa de la sala se encuentra un reloj de arena fuscia con piezas mecánicas y un cristal hexagonal que le da energía a la pieza, los engranajes actúan dentro del movimiento de la arena haciendo el trabajo que la gravedad debería realizar
Alan comprendiendo esto se sienta a observar y le da la vuelta al reloj pero no pasa nada, todo sigue como si no lo hubiese tocado -vaya... Los engranajes mantienen el sentido como si nada...-
Un ruido en la calle llama su atención y se dirige a ver que es lo que pasa, al parecer unas personas discuten el la acera y ve a Peter, su aprendiz, viendo la pelea sin interés y decide bajar para hablar con el pero al llegar ya no está y tampoco los que pelean -que raro- no ve a nadie en la calle, era muy de noche. Cuando voltea para regresar al edificio toda la fachada esta pintada de colores pero no tiene forma y donde esta pisando está el grafitti del bullterrier ya desgastado. Molesto por el grafitti en la fachada piensa en lo difícil que sería quitarlo y solo sigue su camino hacia el apartamento. Cuando entra, Stacy lo está esperando sentada en la mesa con un frasco de medicación blanco que taquetea contra la mesa mientras le dice -mira! Esto es real, sientate...-
El reloj ya no está...

De madrugada hace frío y esta obscuro, la ciudad todavía dormita y sobre la mesa se encuentra una laptop encendida de la noche anterior con un artículo en pantalla de Stephen Hawking titulado "una breve historia sobre el tiempo". Alan se la había pasado leyendo gran parte de las noches luego de llegar del trabajo. Al lado de la mesa un librero con libros de ciencia ficción y temas de metafisica. Todo estaba limpio y en orden alfabético, en este momento por tema, a veces era por titulo y otras por autor. En el fregadero de la cocina está el envase donde Pops bebé agua y el gato bebiendo de el, se había rebosado con las gotas que escurren del grifo mal cerrado.
En la cama yace el celular que marca una melodía mientras vibra "7:15 am"; Alan despierta vagamente tocado el celular y quedándose en cama un poco mas de tiempo. Voltea para ver la mesa buscando algo sólo pudiendo encontrar la laptop, en la cómoda un frasco de medicación rojo ya por terminar y un vaso lleno con agua. Tenia la sensación extraña de haber estado acompañado pero sabía que nadie estaba o había estado la noche anterior.
Contemplando el techo se estira para levantarse de la cama y comenzar su rutina matutina. Al levantarse se acerca a la laptop y la cierra...
En el trabajo, dedica su tiempo a revisar engranajes con lupa dejando pasar los pensamientos sobre el evento del puente, han pasado 8 meses, sin respuestas concluyentes sólo deja que la vida fluya como deba fluir. En un momento de relajación laboral Peter se le acerca casualmente -en la noche haré una reunión en casa con varios amigos, bebida, música, desconocidos... deberías venir y pasar un rato diferente - Peter siempre agradecido por la oportunidad laboral y el apoyo que Alan le ha brindado durante su ingreso en la empresa animosamente trata de retribuir de alguna manera.
Stazman se detiene a pensar mientras relajadamente acepta la invitación de Peter dandole un gesto de aprobación  y una mano en el hombro -seguro, una salida No me caería mal - Peter contento con la respuesta sonríe -genial! 9pm en mi casa, ahora iré a buscar unas piezas que necesito-.
Caída la noche Alan llega a un ruidoso departamento en el ultimo piso de un edificio en el centro de la ciudad con gente bebiendo en el pasillo. Pareciera que todo el piso estaba de fiesta cuando de pronto es divisado por peter ya con un par de tragos encima -Alan! Que bueno que vino siéntase en su casa. Las bebidas están en la mesa. Haz... Lo que quieras-
El sitio está lleno de amigos de Peter y amigos de amigos. El sitio perfecto para estar en comodidad y perderse por un rato, mucho alcohol y un equipo de sonido conectado a la pantalla de la sala que muestra una animación colorida marcando el track "Magnetic man - I need air". Alan busca entre las bebidas una que le llame la atención y se ilumina al encontrarla, termina sirviéndose un trago de jagermeister con bebida energética que no toca por los momentos, solo ve su celular notando que ya era hora suficiente para empezar a beber, su última dosis de medicación había terminado, lo guarda y disfruta de la musica durante un buen rato participando de una que otra conversación grupal sobre nuevas bandas, bares de moda en la ciudad, la movida underground y restaurantes que debe probar. La fiesta no podía estar mejor. Alan decide salir a la azotea un momento para disfrutar del aire de la noche sin antes repetir el trago. A su retirada es divisado con sorpresa por Robert Alvarez, estaba recien llegando con un grupo de mujeres que ya conocían el camino y que saludan fervientemente a Peter que esta bailando con una corbata en la cabeza -ahora vengo- le dice Robert a la chica que lo está tomando del brazo y se dirige a subir las escaleras...
En la azotea, Stazman disfrutar de la vista nocturna que brinda la ciudad mientras bebe, El sonido opaco de la música es suficiente para que un par de parejas conversen tranquilamente en lo que más que una azotea pareciera ser un sitio de esparcimiento.
-Si caes no podre salvarte!..- vocifera jocosamente Robert mientras se acerca hacia donde esta Alan el cual lo ve con incertidumbre replicando -sabía que eras tu aunque casi no recordaba tu rostro... que pequeña es la ciudad para encontrarnos aquí...-
Robert contempla a su lado el panorama mientras le contesta -el mundo es un pañuelo -
Alan mirando hacia el infinito acariciado por la brisa e iluminado de pensamiento por el resplandor de las estrellas y las luces de la ciudad comienza -cierto, y esta tejido con hilos muy especiales...-

Capitulo 4: un día para descansar

Reunidos en la comodidad de un departamento en los suburbios Alan busca refugio en una longeva amistad... -Está cerca. Lo presiento, esta vez es más fuerte! Todo lo que veo me dice que falta poco tiempo para que suceda y aun así todavía no está claro... es como si no pudiera entender por completo lo que me dice la causalidad de la vida, esta cosa casi metafísica que después de tanto tiempo no logro explicar...- Alan habla ido entre sus pensamiento hasta que es interrumpido por Stacy Morgan, amiga de la infancia de Alan, Unidos por el evento donde comenzó todo...
-Por favor Al antes de que sigas, ya este discurso lo se de memoria, ok está próximo, ya te entendí pero tampoco es para que andes dando revuelo. Alguna señal o lo que sea aparecerá y podrás seguir adelante; Bien sabes que las desesperaciones no son para mi y ya fue mucho con que estuvieras recluido en ese hospital-
-siento alterarte pero es excitante y a la vez me extraña que sea ahora. Habían pasado años desde la ultima vez, ya sentía que era cosa de mi imaginación- explica Alan con cierto fervor en su tono de voz.
Mientras Alan inunda su cabeza con sentimientos encontrados de incertidumbre y emoción Stacy va a la cocina para preparar algo de comer -¿sabes? Deberías dejar que todo pase, a veces lo mejor que se puede hacer es no hacer nada -
Alan réplica con seguridad - si pensara así no estaríamos teniendo esta conversación...-
Stacy al escuchar estas palabras queda muda y sin argumentos y solo se escucha un silencio incómodo hasta que termina de preparar unos emparedados con café.
al llevar la comida a la mesa Stacy nota la molesta obsesión de Alan con el orden -ALAN DEJA DE ORDENAR MIS COSAS! DÉJAME MI ORDEN TRANQUILO ¿O ES QUE ACASO IMPORTA?-
-ok ok ya lo dejo, solo me distraje por un momento. No es para tanto - Alan hace una mueca de ironía mirando a Stacy -ya te extrañaba-
Stacy nota al mismo niño que conoció tiempo atrás dentro del adulto... -cállate y come-
Ambos se sientan a comer en silencio disfrutando de la compañia mutua pero Stacy entre incertidumbres le cuesta hablar - oye... Ten cuidado ¿si?-
-solo cambiemos de tema, mmm esto esta bueno - replica Alan terminando el tema y disipando asi las preocupaciones evidentes.
Pops el gato salta sobre la mesa sorprendiendo a la pareja y pidiendo la atención de Stazman
-Hola amiguito ¿me extrañabas?.. Gracias por cuidarlo -
Stacy con actitud humorosa toma a Pops y lo pone en el piso -es mio... y se quedará aquí hasta que mejores-
-¿aún las ves?- Stacy pregunta tímidamente lo cual evoca en Alan recuerdos profundos, destellos de su pasado con Stacy, de cómo se conocieron y un joven contemplando con intriga una línea de luz fuscia brillante como un neon,
Alan hace una pausa fijandose como Stacy baja la mirada mientras come  -no las he visto pero se que las veré, las señales están ahi -
De pronto Stacy se estira y agarra rápidamente la mano de Alan y espera unos segundos mientras mira cada rincón de la habitación, acción que no causa sorpresa de Stazman.
Habiendo esperando unos segundos suelta la tensión de sus pensamientos dejando ir la mano de Alan y volviendo a su silla como si nada hubiese pasado.

Capitulo 3: Fragmentos en la oscuridad

"si tuvieras la posibilidad de empezar otra vez, ¿lo harias?
al llegar al final del todo ¿quisieras regresar?
que triste infortunio arrastras, cuyas cadenas suenan a lo lejos y retumban en el desespero del tiempo... volver para cambiar o volver por añorar, ¿es que acaso sabes lo que viene después del fin? solo queda la nada, pero no me creas... esto lo dice alguien quien hasta ahora nunca ha cruzado la puerta..."

En el oscuro abismo Alan Stazman se encuentra sólo entre sus pensamientos...

-DEBÍASCAERDEBÍASCAERDEBÍASCAERDEBÍASCAER
¿Que hago aquí?
TE ESTAS AHOGANDO...
me estoy ahogando...
Estoy cansado... ¿como llegue aquí?
la vida parece tan ligera y fragil desde aquí, solo hay calma, el letargo y yo, y ni siquiera yo estoy completo, solo esta la parte calmada que no tiene problemas o prejuicios o necesidades, estoy incompleto y a la vez soy yo, el tiempo se disuelve en el espacio, mi mente se pierde...
mi mente se pierde...
TE PERDERÁS!
mi mente se pierde..
ESTAS EN EL LIMBO
mi mente se pierde...
mi mente se pierde...
se pierde...
se pierde...
¿Que hago aquí?
SE PIERDE...

Se pierde poco a poco y nada importa, una exhalación que ha durado por años... ¿donde estoy? este lugar me parece conocido, siento haber estado aquí antes pero no lo recuerdo, solo lo siento, no siento desesperación, solo calma, no escucho nada, mi corazón late muy de vez en cuando.
¿porque me han traído aquí? que hay aquí para mi?-
Del vacío de la mente nacen imágenes, el recuerdo del grafitti en el puente, el haber corrido con desespero. Simples sensaciones animales sin sentido lógico que terminan en los brazos de las aguas. Imágenes fragmentadas del tarmac oscuro lleno de pintura multicolor, lluvia arcoiris y las ruedas de un vehículo marcadas en un charco de colores.
-nada tiene sentido y aun así creo en ello- Alan vive dentro de su mente los recuerdos, detenido en el tiempo donde solo puede ser espectador cuando su último pensamiento se refleja en el espacio -todavía no es tarde- cuando una mano lo toma del brazo.
Tiempo después Alan despierta en una camilla, un paramedico lo revisa mientras él trata de ubicarse físicamente. Seguía en el parque, cercano a las orillas del río. Todo mojado, empieza a recordar vagamente lo sucedido -¿recuerda como se llama, recuerda que le pasó?- pregunta el paramedico; a duras penas Alan contesta -Alan- le dolía todo el cuerpo y estaba muy cansado.
El paramedico alistando la camilla para meterla en la ambulancia le comenta -cayó al río, al parecer sufrió una arritmia. Unos de las personas presentes lo saco a tiempo, tiene mucha suerte. Lo llevaremos ahora al hospital central- Alan finalmente se desvanece de la realidad luego de percatarse de otro hombre empapado y envuelto en mantas que lo mira a unos pocos metros.
Reposando en una banca Robert repasa en su mente lo ocurrido sin hallar sentido, impactado por sus acciones corre sentimentalmente al pasado mientras se repite a sí mismo - lo pude salvar -

Pasado los días, ya saliendo del hospital una mujer acompaña a Stazman quien meticulosamente dobla la receta médica que se le ha prescrito y disimuladamente guarda en su bolsillo, su mirada de descontento se disipa al ver la expresión en rostro de la mujer lo cual mantiene el silencio incómodo en el ambiente mientras se dirigen a tomar un taxi rumbo a los suburbios de la ciudad, un lugar desetresado donde las conversaciones fluyen en la intimidad y los lazos del pasado.

martes, 25 de agosto de 2015

Capitulo 2: Un día de ira

En Colombia, Robert Alvarez de 14 años dedicaba su mañana a recolectar las naranjas junto a su padre santos en su finca de la Montaña. Un naranjal fructífero y de aire fresco, la brisa de la montaña era acompañada por el olor al cítrico maduro y a la grama recién cortada, habían trabajado duro esa mañana cuando llega corriendo despavorido uno de los agricultores vecinos -¡vienen paramilitares!-
Santos al saber lo que se avecina le ordena a Robert que corra lo mas rápido que pueda y se esconda. Le hizo prometer que no importara qué no se dejaria ver, que todo iba a estar bien.
El niño corre al desespero y resuelve meterse en el montón de grama y maleza que habían cortado, era lo suficientemente grande para disipar alguna sospecha.
Robert, metido en la pila de vegetación ve a lo lejos como su padre y el vecino son rodeados por los paramilitares y maniatados. El grupo peina la finca y luego se marcha llevándose a los dos hombres, por cosas del destino nunca revisaron donde se había escondido...
Muy de vez en cuando caminando por la ciudad, estos son los recuerdos que irrumpen en Robert, podía saberse por el cambio en su mirada de un estado cualquiera a impotencia y melancolía. Ya era mayor, un hombre alto de contextura fuerte. La ira la drenaba con ejercicio... y tenia mucha. Tenia una mano vendada gracias a un puñetazo que le dio a un poste hace ya unos días, costumbre habitual que también abarcaba a pesados de mal carácter.
Esa mañana había terminado su entrenamiento y solo caminaba pensativo por la avenida entre siluetas antropomórficas y sonidos opacos dejando pasar el tiempo, era una rutina muy común dejarse llevar por la melancolía al estar cansado, pensando en el presente y el pasado.
Decide ir al parque, un lugar tranquilo donde podía dejar de pensar y disfrutar cuando estaba de malas, compra una limonada enorme y se sienta a ver el agua pasar cuando le llama la atención gente acercándose a la mitad del puente que cruza el río. Algo lo llama a acercarse también, con intriga se apresura a ver.
-solo corrió y cayo al agua - decía una mujer atónita, -¿un suicida?- se preguntaban algunos; Robert al llegar ve al fondo, con la piel herizada y una mirada fuerte salta el barandal y se lanza sumergiéndose cual foca en su medio para desaparecer de la vista de los presentes. El silencio y una calma intranquila inundan el espacio...

domingo, 23 de agosto de 2015

Capitulo 1: El bullterrier y el susurro de la niña

Alan Stazman, un hombre común en una vida común, una casa, un trabajo de oficina, un gato, una vida rutinaria. Todas las mañanas el mismo desayuno con alguna variante a veces pan con jalea y jugo de naranja, otros le adhería tocino, ir al trabajo hasta la hora de salida, sentarse una hora en el parque y caminar a casa las 8 cuadras que le tomaba llegar a la oficina en las mañanas, un hombre común en una vida común, controlada y rutinaria. cada mañana pasaba por la misma acera camino al trabajo, un relojero llamado excepcional, nunca perdía un dia, tampoco llegaba tarde, se dedicaba el dia a mirar por la lupa los mecanismos averiguando fallas y arreglando las maquinarias de los más finos relojes pero eso si, era selectivo, rechazaba la baratija, esa se las dejaba a sus compañeros de trabajo con menos habilidades...
a través de la ventana contigua a su escritorio la gente en la calle le llamo la atencion
-estas mirado, deja de mirarme...-
-voy tarde-
-este me ha pasado por al lado y no me ha reconocido, que se joda!-
-no tengo el dinero, lo mejor es que me vaya de la ciudad y desaparezca-
a cada persona que veía le imaginaba lo que pensaba, una manera de distraerse por un momento, era una costumbre que tenía ya desde niño, imaginaba un mundo donde el era el guionista de la trama, a veces era el protagonista principal y a veces solo el narrador, a veces no era nadie, tan solo un espectador más. Tal vez siempre estuvo cansado de la realidad -puede que ya viniera cansado de la vida anterior, por eso me la paso imaginando- se decía a si mismo de vez en cuando en esos momentos de silencio filosófico donde trataba de desvelar la razón de vivir, de las cosas que pasaban y del futuro que solo podía imaginar en su mente.
Debo concentrarme en el trabajo se decía a si mismo para entrar en razon, de repente escucho una voz -estan observando- una voz de niña susurrando, era como las que imaginaba al ver las personas en la calle solo que esta vez no la habia creado el. Penso que habia alguien en la habitacion pero solo habían relojeros enfocados en sus lupas y peter, el más joven de los compañeros leyendo un manual del fabricante, Latitud modelo N40, Alan le preguntó -has dicho algo?- pero peter estaba tan adentrado en la lectura que solo lo vio por un momento con una mirada desconcertada regresando al final a su lectura. -Debo estar cansado- se decia a si mismo tratando de hallarle lógica, -el subconsciente en momentos de estrés puede actuar de manera errática creando alucinaciones o señales fantasmas, como un sueño estando despierto- sus autoexplicaciones le satisfacen para continuar trabajando como todos los días.
a la hora del almuerzo Alan camina al parque, un hermoso lugar con árboles frente al río que cruza la ciudad cercano al puente principal que une la parte norte de la ciudad con la sur, madres paseando a sus infantes en coche y gente trotando por la caminería de un lado al otro, Alan siempre se preguntaba que los motivaba, que hacía que tuviesen tanta energía para realizar actividad física justo al mediodía cuando es donde hace más sol, claro, una persona acostumbrada al trabajo encerrado en una oficina le debería llamar la atención romper la rutina pero en este particular caso lo sentia una sensacion fuera el mismo y sin embargo muy de vez en cuando salía a contemplar dichos eventos cuando se percata de un graffitti en un muro a los lados del puente, aparentemente nuevo de un bullterrier mordiendo un hueso con expresión de ganador y de pronto...
Alan corre desesperado a puente que cruzaba el río olvidando sus cosas en la banqueta como si no importasen, lo único vital era llegar lo antes posible al puente. Corrió tan desesperadamente que al llegar a la baranda en la mitad del puente se detuvo en seco totalmente cansado y desconcertado. la gente a lo lejos lo veía extrañados por tan aleatoria accion. Alan busca desconcertado viendo la baranda y el agua debajo del puente, estaba tan en mala forma física sin aliento y mareado por la falta de aire -vaya, deberia correr mas seguido- sintió como su cuerpo se desvanecía fríamente y la vista le nublaba, con tan mala condicion fisica habia llegado al extremo del agotamiento. Alan solo cae desvanecido por la baranda al profundo rio, la gente corre desesperada hacia el lugar donde Alan estaba pero sin ver rastros de el.
Alan Stazman se hunde en el profundo río, no se puede mover, su cuerpo está dormido mientras su mente divaga con las sombras del fondo y las luces de la superficie volviendo a escuchar una vez más la voz de la niña -están observando...- mientras es devorado por la oscuridad de las aguas.
-es como un recuerdo que no puedo encontrar...-